Tras la limpieza el sérum o los aceites faciales son el paso fundamental para hidratar la piel. Su textura ligera y oil-free, no deja residuos y se absorbe al instante, dejando una sensación tirante que mejora al momento el aspecto de la piel. Libre de siliconas y alcohol.
¿Qué es un serum facial y por qué es tan importante?
Un serum facial es un producto con una fórmula altamente concentrada ingredientes activos, que se enfoca en penetrar profundamente en la piel. A diferencia de las cremas faciales, que trabajan en la superficie de la piel, los serums faciales tienen la capacidad de llegar a las capas más profundas de la piel. Esto se traduce en beneficios visibles como una piel más suave, luminosa y rejuvenecida.
¿Para qué sirve un serum facial?
Los serums faciales tienen múltiples funciones, desde hidratar y nutrir la piel hasta prevenir el envejecimiento prematuro y reducir la apariencia de líneas de expresión y arrugas. Además, también ayudan a mejorar la textura y tono de la piel, fortalecerla y protegerla de los radicales libres y otros agresores externos.
¿Cómo elegir el serum facial adecuado para ti?
A la hora de elegir un serum facial, es importante saber las necesidades específicas que tiene tu piel. Por ejemplo, si tu piel se ve opaca y deshidratada, un serum hidratante es lo que necesitas. Nuestro radiance serum es ideal para este tipo de tratamiento. Si deseas reducir la apariencia de arrugas y líneas finas, un serum anti-edad es la mejor opción como por ejemplo, the essence.
¿Cómo aplicar un serum facial correctamente?
La aplicación de un serum es sencilla y se puede incorporar fácilmente en tu rutina de cuidado facial. Una vez que hayas limpiado y tonificado tu piel, aplica unas gotas de serum en tus dedos y masajea suavemente el rostro, cuello y escote evitando la zona de los ojos hasta su total absorción. Si tienes piel seca, es mejor aplicar el serum facial antes de la crema hidratante. Si tu piel es grasa, puedes utilizar el serum facial solo.